La red de ordenadores Internet, aprovechando la amplia y creciente infraestructura informática y de telecomunicaciones de nuestro planeta, se ha ido extendiendo rápidamente por todo el mundo, tanto en extensión geográfica como entre sus distintos estratos económicos y sociales. Para las empresas, sumergidas en el mar de la economía global, cada vez resulta más imprescindible utilizar este canal de comunicación, publicidad y comercio, a través del cual se relacionan, se informan, dan a conocer sus productos y servicios, negocian, invierten, venden... Por otra parte, en el ámbito personal y doméstico, poco a poco vamos descubriendo sus enormes posibilidades, especialmente como medio de relación, información, ocio y también formación: Internet nos puede proporcionar canales de comunicación, información y formación sobre cualquier tema, en cualquier momento y en cualquier lugar. Por cierto, Internet también ha motivado un replanteamiento de los derechos de autor. ¿Hasta que punto podemos utilizar libremente la información que encontramos al navegar?
La red Internet, con el apoyo de los ordenadores y de la telefonía convencional y móvil, supone que en cualquier momento y en cualquier lugar, podemos acceder a la información que necesitemos, difundir datos a todo el mundo y comunicarnos e interactuar con cualquier persona, institución o entorno. Además, permite que todos podamos producir y distribuir conocimientos, y nos proporciona un nuevo entorno de interrelación social.
Todas estas funcionalidades de Internet, que están al alcance de cualquiera que disponga de un ordenador con módem/ADSL/cable,, un teléfono WAP/UMTS o simplemente un televisor con webTV, van en detrimento de la utilización de otros instrumentos que hasta ahora permitían satisfacer las necesidades de comunicación e información de las personas, instituciones y empresas: el teléfono convencional, el fax, la prensa ¡y hasta la mismísima televisión!, que ve reducida su audiencia porque sus antes incondicionales jóvenes ahora dedican buena parte de su tiempo libre a los teléfonos móviles, a los videojuegos y a Internet. ¿Se imaginan lo que ocurrirá cuando aumente la velocidad de las conexiones a Internet y la tarifa telefónica para ellas sea aún mucho más plana?
Para Javier Echeverría (2001) Internet es el mejor exponente del emergente tercer entorno en el que se desarrolla la actividad social de las personas. Los tres entornos son:
- El entorno natural. El más cercano, que abarca desde nuestro cuerpo y la comunicación dentro de la comunidad hasta el entorno natural próximo. La educación para este entorno se realizaba tradicionalmente en la familia.
- El entorno urbano. Con la aparición del "entorno artificial" de las ciudades se hace necesaria una institución, la escuela, que además de reforzar los conocimientos sobre el primer entorno proporcione la formación necesaria para interactuar en este segundo entorno A partir de la Revolución Francesa comienza a ser un derecho universal. Otro agente educativo de gran importancia en este entorno es "la calle"
- El entorno virtual. Supone una ampliación de la realidad con nuevos espacios para la interacción social que cada vez cobran más relevancia. No es un espacio físico-espacial y presencial sino electrónico y representacional. Tampoco sincrónico y proximal sino multicrónico y distal.
La red Internet, con el apoyo de los ordenadores y de la telefonía convencional y móvil, supone que en cualquier momento y en cualquier lugar, podemos acceder a la información que necesitemos, difundir datos a todo el mundo y comunicarnos e interactuar con cualquier persona, institución o entorno. Además, permite que todos podamos producir y distribuir conocimientos, y nos proporciona un nuevo entorno de interrelación social.
Todas estas funcionalidades de Internet, que están al alcance de cualquiera que disponga de un ordenador con módem/ADSL/cable,, un teléfono WAP/UMTS o simplemente un televisor con webTV, van en detrimento de la utilización de otros instrumentos que hasta ahora permitían satisfacer las necesidades de comunicación e información de las personas, instituciones y empresas: el teléfono convencional, el fax, la prensa ¡y hasta la mismísima televisión!, que ve reducida su audiencia porque sus antes incondicionales jóvenes ahora dedican buena parte de su tiempo libre a los teléfonos móviles, a los videojuegos y a Internet. ¿Se imaginan lo que ocurrirá cuando aumente la velocidad de las conexiones a Internet y la tarifa telefónica para ellas sea aún mucho más plana?
Para Javier Echeverría (2001) Internet es el mejor exponente del emergente tercer entorno en el que se desarrolla la actividad social de las personas. Los tres entornos son:
- El entorno natural. El más cercano, que abarca desde nuestro cuerpo y la comunicación dentro de la comunidad hasta el entorno natural próximo. La educación para este entorno se realizaba tradicionalmente en la familia.
- El entorno urbano. Con la aparición del "entorno artificial" de las ciudades se hace necesaria una institución, la escuela, que además de reforzar los conocimientos sobre el primer entorno proporcione la formación necesaria para interactuar en este segundo entorno A partir de la Revolución Francesa comienza a ser un derecho universal. Otro agente educativo de gran importancia en este entorno es "la calle"
- El entorno virtual. Supone una ampliación de la realidad con nuevos espacios para la interacción social que cada vez cobran más relevancia. No es un espacio físico-espacial y presencial sino electrónico y representacional. Tampoco sincrónico y proximal sino multicrónico y distal.